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as son un poco intensas por la carga horaria. Siempre ciente a YPF dedicada al área de Ingeniería, Construccio-
nos preguntábamos para qué tantas matemáticas, pero nes y Servicios, que integra las actividades de ingeniería,
después te das cuenta de que es una herramienta que te fabricación, construcción, operación y mantenimiento de
va a servir para otras cosas. En Ingeniería son todas las plantas y yacimientos; dirigida principalmente a los sec-
materias muy importantes porque hacen a la formación. tores del Petróleo, el Gas y la Petroquímica.
Son herramientas que después tenemos al momento de
trabajar. La carrera es hermosa. Es fascinante cuando “Ahora es mi posibilidad de seguir creciendo, de seguir
empezás a descubrir los porqués de todas las cosas, a aprendiendo. Me gustaría volver a Posadas para trabajar. La
poder explicar procesos, a ensayar soluciones a cada ciudad crece a pasos agigantados y en unos años va a nece-
problema que se te presenta. La ingeniería es parte de sitar una mayor planificación. Pero todavía no es el momento.
nuestra vida cotidiana”. Me gustaría aportar mi granito de arena a la producción de
YPF. Posadas es mi ciudad y la amo. Está toda mi familia y
Nuevos sueños amigos. Pero para volver todavía falta”, sentencia.

Germán cumplió un sueño y ahora disfruta de sus Aquel Germán que soñaba con recibirse de ingeniero,
logros. Tal como añoró de chico, ahora trabaja en una el mismo que vino a La Plata para cumplirlo y lo logró,
“gran obra”. Hace apenas unos meses ingresó como y ahora dice haberse quedado sin deseos, acaso sin
ingeniero civil a trabajar a AESA, una empresa pertene- notarlo, ya esté desandando el camino que lo llevará
rumbo a cumplir su nuevo sueño.

“El Albergue es un lugar muy lindo, que te da muchas posibilidades”

Un día de noviembre, a poco de terminar Una semana después, cuando necesitó anotar un
el segundo año de la carrera, Germán Cabral número de teléfono, hurgueteó entre sus bolsillos para
salió de su clase, como todos los días, rumbo encontrar un retazo de papel y encontró el volante.
a su pensión. Lo preocupaba la continui- Esta vez, reparó en lo que decía: “Me puse a leerlo y
dad de sus estudios, que veía tambalear por ahí me enteré que había un Albergue de la Universidad
falta de recursos económicos. Ese día tomó que brindaba hospedaje y comida”, relata Germán,
un camino distinto. Al paso, tomó el volante quien confiesa que la información le generaba muchas
que un chico le dio en una esquina y casi sin dudas: “No entendía la dirección, dónde quedaba, creí
mirarlo, lo guardó en el bolsillo de su campera. que estaba muy lejos. Pero ingresé igual a la página
de internet, me anoté para ver qué onda y antes de fin
de año me avisaron que había quedado seleccionado.
Me pedían que me presente en el Albergue para com-
pletar unas planillas y fui. Cuando llegué y lo conocí,
cambió por completo mi parecer. Ni lo dudé. Iba con
todas las dudas del mundo y me encontré con un
lugar tan lindo, con tantas facilidades, que la segunda
vez que fui para terminar las cuestiones administrati-
vas llevé todas mis cosas para quedarme”, relata Ger-
mán, quien ingresó al edificio de 61 y 127 cuando en la
residencia vivían 35 estudiantes. Hoy, son 110.

El Albergue Universitario de la UNLP es una resi- HISTORIAS DE VIDA
dencia gratuita en la que los estudiantes reciben las
cuatro comidas de lunes a lunes, carga mensual en su
tarjeta SUBE, bicicletas, salas de recreación y compu-
tación con WIFI, seguro médico, y están acompaña-
dos por un equipo interdisciplinario de contención y
apoyo psicopedagógico.

Albergue de la UNLP.

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